lunes, 12 de enero de 2009

LA MUERTE DESDE OTRO PUNTO DE VISTA

Hace como 1 año aproximadamente comencé a escribir en el blog y unas de las cosas sobre las que escribí fueron sobre los fallecimientos, como aquí se hacen en el pueblo, y bueno, lo que había escrito era como es la costumbre aquí en el pueblo, ahora me toco vivir 2 y bueno, mi impresión personal sobre el asunto se las cuento.

El día 2 de enero del 2009 estábamos (mi esposo y yo) de vacaciones de año nuevo, con toda mi familia en Barra de Navidad y nos llego un mensaje al celular en el que nos decían que 2 tías de Rodolfo habían fallecido. Así que tomamos el primer camión que salía a Guadalajara y de ahí directo a San Juan.

Después de cómo 20 hora de camino llegamos a nuestro destino, a tiempo para enterrar alas tías.

Pasaron ya 9 días (el novenario de rosarios) el Día de hoy será la misa de una de ellas y mañana la de la otra. Pero para todo esto hay preparativos antes de.

Para la del día de hoy ayer tuvimos que hacer mucho trabajo. Después de ir a Misa dominical, nos dirigimos a la casa de la familia en que se estaba necesitando la ayuda. Cual fue mi sorpresa al entrar al ver como a 20 señores bien apoltronados en sus sillas, tomando el solecito de la mañana, calentando su carita, para que no se fueran a enfriar. Y aun lado una fila de señoras c como en 5 mesas, una junto a la otra , como si estuvieran en una maquiladora, quitándole espinas a los nopales, otras moviéndole al fuego en las cazuelas de barro (eran como 5 cazuelas) otras, picando nopales, y diversos trabajos así durante el día. De los 20 señores ahí sentados solo 3 trabajaban, llevando y trayendo bultos.

Es increíble como el machismo de este lugar y de nuestro país.

Me toco ayudar con la cortada de los nopales, mientras otras, cortaban cebollas. Las que estaban quitándole la espina al nopal, al terminar se pusieron a limpiar frijoles y habas, cuando terminamos picar, nosotros, nos dedicamos a limpiar el ajonjolí y las almendras, que se dorarían para el mole, mas tarde al terminar nos pusimos todas a hacer tortas de camarón el cual alguien se había encargado de dejar bien molido y revuelto con huevo y baba de nopal (para que no se desbarate tan fácil).

Mientras unas hacían bolas, otras preparaban la torta y otras se las llevaban a las cazuelas para freírlas.

Mientras todo esto se hacia un grupo de mujeres se encargaba de hacer la comida para todas las que estábamos ayudando.

Por la mañana nos dieron unas tortas de charales, y por la tarde nopales con cebolla jitomate.. y claro hartas tortillas.

Eso fue el día Domingo. Hoy Lunes en esa casa se dedicaron a terminar de preparar las tortas (ahogarlas en salsa) e ir a repartir a algunas casa de las personas que fueron a ayudar, además de repartir los nopales y demás comida. Y esperar a que fuera la misa, y dar de comer a las personas que los acompañaron.

El día de hoy en la casa de la otra tía mañana es cuando se levanta el luto. Y hoy se comienza con la comida cuando llegue fui “regresada” a mi casa, ya que yo iba preparada ya con mi cuchillo para picar nopales y cual es mi sorpresa que no había nopales.. que en esta ocasión lo que se necesitaba era gente para batir huevo (espumarlo para capear) y gente que volteara las tortitas de pescado.

En esta casa lo que se estaba preparando es filete de pescado capeado. Así que fui a dejar mi cuchillo y fui por mi palita volteadora, que a la mera hora no necesite, ya que me toco capear los pescados y meterlos al aceite.

Cuando llegue con mi pala para voltear, fue interesante escuchar a las señoras que les tocaba hacer el batido del huevo para espumarlo, el ruido que hacían, todas como una sola maquina, mientras unas quebraban los huevos otras batían, otras en un mega comal-sartén friendo el pescado y al rato nos pusieron otro y nos dedicamos a lo mismo.

Mientras que otras se dedicaban a dejar el pesado ya capeado en una reja, para que se escurriera muy bien el aceite y luego pasarlo a una mesa y dejarlo bien tapado.

Otras hacían tortillas y otras de comer para las que estábamos trabajando.

Toda esta comida que se preparo no era para 20 o 30 personas, si no para un aproximado de 200 personas o un poco más.

Es increíble como a pesar de que la gente no tiene $ que a veces estás molesto con algún familiar o vecino, siempre en estos momentos de crisis se une el pueblo y van a ayudar.

Y se han de preguntar: ¿de dónde sale dinero para dar de comer a tanta gente?

Pues sencillo, todas las personas del pueblo que van a ayudar o que van a dar el pésame a la familia o van a los rosarios del novenario o van al entierro o todo esto, ayudan no solo con su mano de obra, muchas también aportar su dinero, o llevan un kilo de frijol o unos cuantos nopales.

Esto me pone de lección que los mexicanos somos solidarios con los demás. Que a pesar de las cosas tristes que nos pasen, nos volvemos unidos y podemos llegar muy lejos. Siempre y cuando nos unamos.

3 comentarios:

killer queen dijo...

HOLA!! amiga tanto tiempo!! tenemos una charla pendiente de que tal fue tu finde año!!podés creer que estaba a punto de comentar y se me cortó la luz!!jajaja

En toda la zona norte de mi país existia la costumbre de dar de almorzar o cenar a las personas que se habian quedado en el velatorio del difunto ....(todo corria por cuenta de la familia del muertito!)
Pero poco a poco esa costumbre se perdio...

Creo que todos los pueblos tienden a unirse en los peores momentos . Cuando más nos golpean de alguna forma surge lo mejor del ser humano.
Te mando un beso y mañana me conecto asi charlamos!! :D

Anónimo dijo...

Hola Cri!!! Tanto tiempo!
Que gusto que hayas pasado por mi blog, y eso que lo tengo medio abandonado.
Por suerte anoche te estuve leyendo, me parece sumamente interesante todo lo que contás de las costumbres en México, en Buenos Aires todo es tan distinto!!
Claro, que mal eso del machismo, cuanto trabajo para las mujeres, me agoté de solo leerlo... (y me dió tanto hambre!).
Igual es meritorio lo que contás de la solidaridad y la preocupación por darles de comer a todos los que van a velar o rezar por el difunto... acá nada que ver! TE pasás la noche en un salón de velatorio, te llenás de café recalentado y al otro día entierro y nada más. En algunos lugares hacen lo de las novenas, pero no en Buenos Aires...
Me encanta leerte cuando escribís sobre las costumbres! También leí lo de Navidades (yo también soy grinch como tu marido), y hasta me das antojos de probar tantas ricas comiditas!!!
Con respecto al hurón, tenés razón, mejor intentar un hijo... pero no está viniendo y yo ya tengo 41... este año se define para sí o para no...
En fín! Un gusto leerte, gracias por pasar por el blog y hasta prontito!!!! (un día subime alguna receta bien mexicana!!).
ABrazos,
Sandru

Anónimo dijo...

WOW 41??? no pues pense que eras mas joven, pero aun asi estas joven aun puedes, si sigue llegando aunque sea en intervalos.. ;)
y claro que si luego te paso una receta bien mexicana.

Tal vez una del mole.